Por Leonardo Granato

Con motivo de la primera visita oficial de la presidenta de la República Federativa del Brasil, Dilma Rousseff, a la República Argentina el 31 de enero de 2011, las primeras mandatarias de ambos países emitieron una Declaración Conjunta, además de suscribir una serie de acuerdos, cuyo contenido referenciaremos brevemente en el presente artículo.

Desde 2003 las relaciones en eje de Brasil y Argentina generó una sinergia que derivó en una estrecha cooperación e integración en los niveles bilateral y regional, producto de un claro entendimiento político y de una diplomacia presidencial llevada a cabo por los entonces presidentes Néstor Kirchner y Luiz Inácio Lula da Silva (1).

En términos actuales, y en ocasión de la visita de la primera mandataria brasileña antes mencionada, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner destacó que el "destino en la Argentina y también el destino de la región, está indisolublemente unido al Brasil y también el destino del Brasil indisolublemente vinculado al de la Argentina y de toda la América del Sur", agregando que "si hasta ahora Brasil y Argentina estaban unidos, creo que a partir de ahora estarán aún más. Esto es lo que ambas presidentas queremos"(2).

La Declaración Conjunta (3) refleja lo esencial del entendimiento de Argentina y Brasil a partir de reafirmar la importancia "de la relación estratégica entre la Argentina y Brasil como eje constitutivo de la integración a nivel regional" y, al reiterar el "compromiso con el proceso de integración bilateral como una política de estado en ambos países, a fin de alcanzar las altas aspiraciones de desarrollo y prosperidad de sus respectivos pueblos" (I.1).

Asimismo, las primeras mandatarias consideraron "a la alianza estratégica como piedra fundamental para el éxito del proyecto común de integración, en el cual destacan la importancia de la profundización del MERCOSUR como principal ámbito de integración política, social, económica y comercial de la región, y la constitución de la UNASUR como factor de unidad y de cooperación en América del Sur" (I.4) (4). Al respecto, cabe resaltar el Plan Brasil 2022, dos de cuyas metas son profundizar y expandir el MERCOSUR y consolidar la UNASUR (5).

Con relación a los temas de la agenda bilateral, las presidentas "ratificaron la vigencia del Mecanismo de Integración y Coordinación Bilateral y determinaron la atención prioritaria al desarrollo de nuevos proyectos que consoliden una vigorosa agenda de cooperación en el área social, más allá de la aceleración e intensificación de los proyectos existentes en las áreas estratégicas de cooperación nuclear, espacial, defensa, industria naval, industria aeronáutica, infraestructura, energía, y TV digital" (II.2).

En lo relativo al intercambio comercial cuyo volumen alcanzó niveles record en 2010 cercanos a los 33 mil millones de dólares y que involucra, mayoritariamente, bienes industriales de alto valor agregado, las presidentas decidieron mantener la regularidad de las reuniones de la Comisión de Monitoreo del Comercio, que desempeña una importante función como ámbito para el tratamiento de cuestiones puntuales en el intercambio comercial y para el desarrollo de iniciativas con el objetivo de promover el crecimiento sostenible de las relaciones económicas y comerciales bilaterales (II.3, 4) (6).

Por su parte, en la Declaración Conjunta se destacó también el avance de los trabajos con vistas a garantizar un desarrollo productivo integrado, cuyos resultados se traduzcan en estrategias conjuntas de producción, comercialización y de complementación productiva. En este orden de ideas, las mandatarias afirmaron "la necesidad de implementar rápidamente mecanismos financieros que contribuyan o faciliten la participación de las PyMEs en los procesos de integración productiva" (II.6).

Resulta de sumo interés traer a colación la trascendencia dada por las presidentas al papel de la cultura "como elemento de desarrollo económico, fortalecimiento de la identidad y construcción de ciudadanía" (II, 15). En este sentido, destacaron la importancia "de fortalecer la integración del mercado de bienes y servicios audiovisuales entre la Argentina y el Brasil" e instruyeron a las respectivas agencias de regulación a presentar propuestas que promuevan mayor libertad de circulación de bienes y servicios audiovisuales en condiciones de reciprocidad (II, 14).

En la Declaración se insta a la Secretaría de Cultura de la Nación Argentina y al Ministerio de Cultura del Brasil a fortalecer el intercambio de expresiones culturales entre los dos países, así como el intercambio de experiencias en políticas públicas de alcance social (II, 15) y, se destaca la importancia de otorgar una amplia difusión y plena vigencia al Sello MERCOSUR Cultural con miras a facilitar la circulación de bienes que formen parte de proyectos culturales y fortalecer así la integración cultural en el MERCOSUR. Destacaron asimismo, la reciente creación del Fondo MERCOSUR Cultural con el propósito de financiar proyectos y programas que fomenten la creación, circulación promoción, protección y difusión de bienes y servicios culturales (II, 16) (7).

Asimismo, en ocasión de la Declaración Conjunta, las presidentas suscribieron un acuerdo por el que crea la Comisión de Cooperación y Desarrollo Fronterizo (CODEFRO), concebida como una instancia encargada de identificar y proponer acciones para el desarrollo y la integración de la frontera común.

(1) Al respecto, véase Granato, Leonardo. "El eje Argentina-Brasil: refundando la integración suramericana". En: SURdesarrollo, 3 (02), 2011. Disponible en: http://www.centrocultural.coop/blogs/surdesarrollo/2011/02/el-eje-argentina-brasil-refundando-la-integracion-suramericana/

(2) Cfr. Fernández de Kirchner, Cristina. Declaraciones a la prensa durante el viaje de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, a la Argentina, en Sala de Conferencia de la Casa Rosada, 31 de enero de 2011. Disponible en: http://www.casarosada.gov.ar/index.php?option=com_content&task=view&id=8032&Itemid=66 [recuperado: 12/02/2011].

(3) Disponible en: http://www.itamaraty.gov.br/sala-de-imprensa/notas-a-imprensa/declaracao-conjunta-por-ocasiao-da-visita-da-presidenta-dilma-rousseff-a-republica-argentina-2013-buenos-aires-31-de-janeiro-de-2011 [recuperado: 11/02/2011].

(4) Sobre este tema, véase Granato, Leonardo. "El eje de integración". Diario Página/12, 31 de enero de 2011. Disponible en: http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-161478-2011-01-31.html

(5) El propio presidente Lula encomendó al ministro de Asuntos Estratégicos Samuel Pinheiro Guimarães pensar estratégicamente el futuro del país, fijando metas para el año 2022, año del Bicentenario de la Independencia. Para ello se elaboró "O Plano Brasil 2022" siendo uno de sus capítulos "A América do Sul em 2022". Disponible en: http://www.sae.gov.br/brasil2022/

(6) En consonancia con las iniciativas desarrolladas en los últimos años en materia de Promoción Comercial Conjunta y con vistas a lograr un mejor posicionamiento de la producción de ambos países en los mercados internacionales, Argentina y Brasil suscribieron el 31 de enero de 2011 el Memorando de Entendimiento para la Promoción Comercial Conjunta. Dicho instrumento está destinado a fomentar el crecimiento de los flujos de exportación de ambas partes a terceros mercados, haciendo énfasis en los bienes y servicios de significativo valor agregado, y a desarrollar conjuntamente acciones que conduzcan a la profundización de la asociatividad de los empresarios de ambos países.

(7) En este marco se suscribió el Protocolo de Cooperación para el Fomento a la Coproducción de Películas de Largometraje entre el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) y la Agencia Nacional del Cine (ANCINE) de los respectivos países.

Leonardo Granato es Doctorando UFRJ e Investigador del Departamento de Economía Política y Sistema Mundial (CCC).