El presidente Evo Morales promulgó el 7 de octubre el Decreto Supremo 1754 para la constitución de empresas sociales en el país y celebró el 62 aniversario de la creación de la Confederación de Trabajadores Fabriles de Bolivia.
"En su día a nombre del Gobierno Nacional desearles muchas felicidades, éxito en su trabajo sindical, éxito a los compañeros de base en ese trabajo de seguir mejorando la economía nacional y destacamos su aporte para el desarrollo del pueblo boliviano", manifestó el Jefe de Estado en un acto realizado en Palacio de Gobierno.
El Mandatario indicó que el Gobierno atiende las demandas de todos los sectores, en ese marco se inscribe el decreto supremo que establece que ante el cierre de las empresas, los fabriles pueden ser dueños de esas compañías.

"Ahora ya no hay que estar sometido a las amenazas de cierre cuando los dueños no quieren respetar los decretos, ahora más bien si les amenazan de esta manera es mejor que la empresa entre en quiebra o cierra el empresario entonces los fabriles serán dueños, serán nuevas empresas sociales y comunitarias", resaltó.
Por su parte, el ministro de Trabajo, Daniel Santalla, explicó que el decreto es un 'reconocimiento' del Presidente al aniversario de los fabriles, que establece la facilitación de la constitución de empresas sociales de carácter privado en el marco de la Constitución Política del Estado.
"Producto de eso es Enatex, Intrabol, Traboltex y lo seguiremos haciendo contra aquellas empresas que se encuentren en esa situación de quiebra, a veces esa situación se presentan por la mala administración por parte de los dueños y gerentes, por la falta de innovación tecnológica", dijo.
Asimismo, Santalla detalló que a ese decreto acompaña una resolución biministerial contra las empresas que no respetan la ley respecto a los derechos laborales. "Donde se desconoce la organización de los sindicatos, la resolución está referida a esas empresas que infringen leyes sociales y que serán prohibidas a exportar con las facilidades que les otorga el Gobierno", argumentó.
Destacó la resolución de su cartera de Estado que regula la instalación de 'manera indiscriminada' de cámaras de vigilancia en lugares que afecten a la dignidad de los trabajadores. "Es una forma de amedrentar a los trabajadores. Son tres disposiciones legales: el decreto supremo, una resolución biministerial y una resolución ministerial", dijo.
El Presidente indígena reflexionó sobre las luchas pro reivindicaciones que -a su juicio- no sólo deben ser de carácter sectorial, regional sino nacional.
«Las reivindicaciones son justas es un derecho constitucional de los trabajadores, pero también depende las reivindicaciones de la economía nacional y antes la reivindicación era del patrón, el privado del Estado cuando las políticas venían de arriba y afuera, las privatizaciones, las llamadas concesiones, las subastas del patrimonio y la entrega de los recursos naturales, por lo tanto era un saqueo y una dominación política, económica y hasta militar", argumentó.
Aseguró que en 'poco tiempo' cambió la situación social, cultural, económica y financiera en Bolivia y por ende la imagen internacional.